Hay un sistema de resolucion de disputas bastante poco conocido, pero a mi entender brillante. Imaginemos por ejemplo una negociacion sindical. Los empresarios ofrecen un 2% de aumento, el sindicato pide un 20%, y no hay manera de ponerse de acuerdo, de modo que llaman al gobierno a mediar.
El mecanismo funciona asi: cada una de las partes hace su mejor propuesta, en sobre cerrado. El arbitro abre los dos sobres, y tiene que elegir uno de los dos. No hay puntos medios. O elige lo que ofrecieron los empleados, o lo que ofrecieron los empresarios. La unica excepcion, es si los monots se cruzaron (es decir, los empresarios ofrecieron mas aumento del que pidieron los sindicatos).
La belleza del sistema es que cada una de las partes tiene que moderar su posicion al máximo. Si uno de los dos se pone intransigente, el arbitro va a elegir la posicion del otro.
La ventaja de este mecanismo es doble. Por un lado, se hace mas fácil la vida del arbitro. Por otro lado, como a cada uno le conviene moderar su posición, la convivencia posterior se hace mas llevadera.
Sr. Ministro de Trabajo, le sugiero que lo pruebe.

