Cuantas veces escuchamos decir: Ese tipo tiene cara de chorro? O Tiene cara de nabo? O cara de intelectual? Juzgar a la gente según su cara es una forma de prejuicio, verdad? Al fin y al cabo, qué influencia puede tener la moral o la inteligencia de una persona sobre su cara?
Aparentemente más de lo que uno piensa. El Economist informa sobre un estudio hecho en Rice University por Jefferson Duarte y sus colaboradores. Tanto la modalidad del estudio como los resultados son fascinantes.
Duarte quiso ver si las caras de la gente delataban su confiabilidad crediticia. Para eso, juntó información del sitio de peer-to-peer lending prosper.com. En Prosper, la gente pide dinero de otra gente, y pone su perfil, incluyendo su rating de crédito y opcionalmente la foto. De ahí Duarte sacó 8000 fotos de personas que solicitaban crédito. El paso siguiente era saber si tienen cara de buenos pagadores. Para eso utilizó Mechanical Turk, un sitio de Amazon donde se contratan micro-tareas. Cada cara fue analizada por 25 personas, que tenía que responder cuál era la probabilidad de que esa persona devolviera $100 que se le prestan. Se analizaron los datos, y dio que la opinión de la gente está altamente correlacionada con el rating de crédito. Además, la probabilidad de que alguien obtenga un crédito en Prosper depende en gran medida de si tiene cara de buen pagador. Si tiene cara de mal pagador, en promedio paga interés más alto.
En conclusión, no está tan mal juzgar a la gente por su cara. Dicho de otra manera, a los estafadores sus caras los delata. Eso sí, los realmente buenos estafadores tienen que tener cara de buenos, de lo contrario nadie les confiaría su dinero. Si no me creen, miran las caras de bonachones de Madoff y de Stanford.
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