Nicolas Jodal retwiteo (se dira asi?) este post de Paul Graham.
Vale la pena leerlo, lo que dice es bastante obvio, pero esta muy bien escrito y no esta de mas recordarlo.
En todo momento hay un tema que nos da vueltas en la cabeza, y captura espacio en nuestra mente aunque no quieramos, es asi que surgen las buenas ideas cuando menos lo pensamos, por ejemplo en la ducha.
A esto me refiero cuando muchas veces le digo a los emprendedores:
«En que pensas todas las mananas cuando te estas afeitando/maquillando?».
Pero lo interesante y nuevo que plantea Paul aca, es que a veces hay cosas que no queremos que ocupen ese espacio, pero si lo hacen, y eso nos quita capacidad de enfocar y ser creativos en otras, y el identifica dos muy claras: Levantar capital y disputas.
En fin, leanlo ustedes, vale la pena.
Y si además consideramos que los sistemas humanos se mueven en dirección a las preguntas y a los temas que tratan todos los días (como bien dice Baliño en su libro «No más pálidas»), entonces tenemos que empezar a concentrarnos en seleccionar los temas que hablamos, porque a la corta van a ser los temas sobre los que pensamos en la ducha, y como le dedicamos más tiempo, seguramente será en lo que tengamos éxito.
Por una especie de ultracorrección, la primera persona del plural del presente de subjuntivo de querer (queramos) se construye en ocasiones con doble rr, sin duda por contaminación del futuro, que sí la tiene. En el subjuntivo interviene otro tipo de irregularidad, la diptongación de la e tónica en algunas personas (quiera, quieras, quiera, quieran), lo que no sucede cuando ésta es átona (queramos, queráis), aunque también se puede oír, en hablas populares, quiéramos, explicable también por contaminación con las cuatro formas con diptongo.