Cada vez que hay un paro como el de hoy, o los 1 de Mayo cuando escucho los discursos sobre la lucha de clases, la oposición de intereses entre los patrones y los empleados, etc., me cuestiono donde pasa la línea entre uno y otro.
Por ejemplo: un Gerente de Sección de una empresa es patrón o empleado? En una empresa normal este tiene el derecho (y deber) de definir aumentos de salario, o incluso despedir empleados. Lo cual indudablemente lo convierte en patrón. Pero el también tiene un jefe con quien negocia su salario y quien lo puede despedir. O sea es empleado….. Si es patrón, entonces en el momento que fue ascendido se pasó del bando de los buenos al de los malos? (o viceversa según el discurso que escuchemos).
Y el personal de RRHH de la empresa de que lado de la línea está?
Llevando esto al extremo, un CEO de una empresa multinacional es patrón? Supongo que si, pero su empleo y condiciones dependen del criterio de sus jefes (el directorio), o de los accionistas! Si ,seguramente eso son los malos de la película!. Entonces si yo tengo acciones de Facebook, yo soy el patrón y Mark Zuckerberg es mi empleado?
O los gerentes de las empresas del Estado en Uruguay, por ejemplo Antel, Ancap y UTE, son patrones o empleados? y quienes son sus jefes? Los que les pagamos el sueldo o los pusimos en ese puesto? Y lo mismo para los ministros o incluso el mismo presidente.
O, que pasa cuando un empleado recibe opciones o incluso acciones de la empresa donde trabaja? De que lado del mostrador queda? O si el empleado tiene un bono que depende de los beneficios de la empresa, eso lo convierte en un explotador?
Creo que llegó la hora de que todos entendamos que el mundo NUNCA es blanco y negro, que todo tiene matices, que esa polarización entre clases es obsoleta, y tanto los «patrones» como los «empleados» y especialmente la relación entre ambos tienen que redefinrse, o la esquizofrenia nos va a matar.
Sin duda es una pavada la polarización entre patrones y empleados, entre los buenos y los malos.
Ahora, sin duda también, usted y yo pertenecemos a una clase social muy distinta a la de un peón rural o una de las empleadas que limpian nuestras casas. Nuestros hijos nunca van a trabajar limpiando baños o acomodando productos en un supermercado.
Pretender olvidar 2.000 años de historia (al menos), negar la existencia de clases sociales, decir que todos tenemos las mismas posibilidades, que si una persona no tiene lo que tengo yo, no logró lo que yo, es casi que únicamente por su responsabilidad, porque no se esforzó como yo, porque no fue inteligente como yo, es igual o más esquizofrénico que seguir dividiendo a las personas entre patrones y empleados.
Seguro que con polarizaciones, divisiones entre patrones y empleados, buenos y malos, no se llega a una mejor sociedad. Pero también es seguro que cerrando los ojos, pretendiendo que cosas que existieron toda la vida y siguen existiendo, de la noche a la mañana dejaron de existir, tampoco.
Proponer que la linea no es clara, evidencia de que lado de la linea se encuentra.
Hay una definición por ahí que clasifica a la clase obrera como la que , para «subsistir» , debe arrendar su trabajo.
Esto dejaría por fuera a los que no necesitan trabajar para subsistir. Por ejemplo un accionista o CEO que tiene medio millon de dólares en el banco, por mas que trabaje muchísimo, no está en peligro de pasar hambre o quedar en la calle si lo echan o se funde la empresa. Tambien la «calidad» de trabajo es abismalmente distinta. No es lo mismo trabajar en una linea de esamblaje de juguetes en China que ser gerente de una multinacional.