Eso es lo que dice el gobierno (obviamente para terminar el tema), pero creo que la oposición debería levantar el guante y decirle que si, pero en serio, y no solo en lo relacionado a Ancap sino al «gobierno corporativo» de todos los entes públicos, ministerios, etc.
Pero primero volvamos a Ancap, muchos pedimos la destitución de gerentes (me incluyo), pero pensándolo bien, como sabemos si fueron buenos gerentes o no? Alguien nos dijo alguna vez que metas tenían? Quizás las metas que les pusieron tenían solo que ver con invertir lo máximo posible o hacer la mayor publicidad posible (puede parecer ridículo, pero en la época de las punto.com en el 2000 pasaba eso).
Si esas eran las metas, entonces fueron excelentes gerentes.
Que hubiese pasado si el MEF los autorizaba a subir el precio del combustible, digamos a 50 pesos el litro, entonces el balance de Ancap cerraba precioso, y no estaríamos en este lío? Los gerentes de Ancap serían unos genios porque consiguieron que Ancap gane plata?
Por que el MEF dijo no al aumento de combustibles?, el MEF dijo no, porque curiosamente, debe ser la única entidad del gobierno que tiene métricas, y metas para esas métricas. Tiene una meta de inflación (que la publica, tanto la meta como el valor), y aunque hace tiempo no logra cumplirla, por lo menos es claro que hace esfuerzos por lograrla (o no alejarse tanto), tiene métricas de crecimiento del PBI, de desocupación, de reservas, etc. Lo que «causó» el lío en Ancap fueron las «metricas» del MEF, o como voy a desarrollar a continuación, el buen gobierno corporativo que tiene el MEF. Lo preocupante es que no hubiese métricas y metas parecidas en Ancap que hubiesen sonado las alarmas años antes.
Que sería entonces mirar al futuro?
Deberíamos mejorar el gobierno corporativo de los organismos del estado, los políticos deberían fijar y publicar los objetivos, los directorios bajarlos a metas y métricas transparentes, y los gerentes ser evaluados de acuerdo a estas.
Ojo que no necesariamente las metas tienen que ser económicas, como ganar x dólares , las metas pueden ser sociales también, a modo de ejemplo en UTE es importante la cobertura, la disponibilidad de la energía, el % de energía renovable, etc. Justamente, el transparentar estas metas y cumplirlas debería ser lo que diferencia una corriente política de otra. Un gobierno más de derecha se podría poner como meta que Ancap gane menos dinero pero que el combustible sea lo más barato posible, y un gobierno de izquierda quizás podría tener objetivo de recaudar más para generar recursos para el Mides. Cualquiera de las opciones son válidas y me parecen bien, siempre y cuando vayan en linea con lo que haya votado la mayoría y se haga de forma transparente.
Muchas veces una meta contrabalancea a la otra, es la naturaleza de las cosas, por ejemplo en Ancap una métrica sería en precio del combustible, y una meta razonable sería que no sea mayor en x% del promedio de la región (o del promedio de los países que no tienen petróleo), otra métrica sería hacer x inversiones, y otra podría ser tener x rentabilidad (o incluso tener rentabilidad negativa, pero hasta cierto limite, como lo es por ejemplo la meta de deficit fiscal del Gobierno). Todas estas metas están en cierto sentido opuestas entre si, y el secreto de un buen gerente es mantener un buen equilibrio para cumplir con todas (o la mayoría).
Cual es el problema en Uruguay? Ningún organismo tiene metas, o si las tiene no son públicas y transparentes, entonces es imposible juzgar si se hacen bien o mal las cosas. Si uno no tiene metas claras y medibles, siempre es fácil encontrar algo bueno para justificar que las cosas se están haciendo bien. Tomando como ejemplo el MEF, digamos que no tuviésemos metas de deficit fiscal y este año tuviésemos un déficit de 5%, siempre podríamos decir que fue un buen año porque estuvimos mucho mejor que Brasil o Argentina.
Lo absurdo de que tengamos buen manejo del Gobierno Corporativo en el Ministerio de Economía y muy malo en todos los otros, es que la razón es que en Economía nos lo exigen de afuera, si no tuviésemos metas y métricas transparentes no tendríamos crédito. Nos lo exigen las calificadoras, los organismos internacionales, etc.
Lo deseable sería que estas metas y métricas se publiquen no por requerimiento de afuera, sino porque lo exigimos los ciudadanos.
Si los políticos, tanto del gobierno como de la oposición, de verdad quieren mejorar al país esto es en lo que deberían centrar la discusión, no en quien fue culpable, o si siempre fue así, o si hay que remover gerentes.
Pablo hace tiempo que leo su blog (me parece excelente, me identifico mucho con el), no soy de comentar los post ya que prefiero no interferir con lo que escribe el autor. Considero que los comentarios son mas para foros o espacios de debate o intercambio que para publicaciones. Con este post puntualmente me obligaste a «comentar». No solo coincido 100% sino que el planteo que haces es correcto y seria de fácil aplicación. La conclusión desafortunada es que nuestra clase política no tiene habilidades técnicas para medir resultados y lo peor es que la cultura de la clase política esta mas arraigada a la confrontación y denostacion del opositor que a la obtención de resultados medibles.
Muy bueno el post y el blog.
Gracias Jose, tal cual, no estoy descubriendo la pólvora acá, y estoy seguro que en el sistema politico hay gente capaz, y que lo entiende, pero se ve que no existe la voluntad real.
Por lo menos, si buscamos algo alentador, sobre este post recibí comentarios positivos de todo el espectro (algo poco usual)
Abrazo