Los datos se dieron a conocer hoy y vuelven a marcar tendencia e impactar. El flujo migratorio uruguayo no cesa ,- mas de 12.000 en 4 meses, aun en condiciones de crecimiento economico (macro por lo menos) . Año tras año, hay mas de 2 de decenas de miles de personas(jovenes y calificadas mayoritariamente**) que deciden buscar su horizonte en otros destinos
Que nos dice esta tendencia? Que aun en un periodo de bonanza ( o aparente al menos*, eso se podria agumentar) hay muchos que no encuentran en Uy su espacio . En que se vincula esto con este blog ?
En mi vision , el entorno de desarollo , de opciones, oportunidades , el clima general para desarrollar iniciativas , emprendimientos es limitado cuando no un camino con obstaculos frecuentes
Si a eso le sumamos el tema de la viabilidad del pais como proyecto colectivo, debate que tuvo interesantes aportes en el verano pasado a traves de Tomas Linn, Marcos Cantera o Gonzalo Aguirre, nos encontramos ante la situacion de un pais que sin lugar a duda ejerce fuerzas centrifugas y no centripetas sobre sus habitantes y los promitentes inmigrantes (que los hay) son aquellos que buscan pasar sus años dorados lejos de las grandes y desarrolladas urbes en ambitos mas tranquilos y aun «virgenes»
Entonces que ? Siendo los participantes de este blog factores en cuyas manos puede estar , en parte al menos , cambiar las condiciones del entorno para minimizar en algo la tendencia, la propuesta apunta en tal direccion antes que esto sea un enorme geriatrico
* ya estan los que hablan de cuando baje la marea y se caiga en la dura realidad
** ya paso la etapa que los que se iban es quienes no tenian calificacion alguna e iban a al busqueda de lo que caiga. Lo que se va es el capital humano formado y con potencial
Pablo Brenner & Sergio Fogel Blog 
Por julio de 2007 escribía esta entrada en Actualidad Uruguaya a propósito del trato (salarial) a los profesionales en nuestro país y en particular en el Poder Judicial, aunque la situación es análoga en todo el estado y se traslada a empresas privadas. Con el poder que los gremios han ido desarrollando y la constante beneficencia de los gobiernos para evitar conflictos, Uruguay goza de la deshonrosa y absurda situación de que los profesionales y los burócratas de carrera tienen salarios parecidos (y en muchos casos los burócratas ganan más). ¿Qué profesional va a querer trabajar en el país cuando su labor no es reconocida de la manera que se debería? No me refiero estrictamente al dinero, que no es más que la forma de mostrar a ese profesional que se reconoce el esfuerzo de su estudio y la responsabilidad de su labor. Los profesionales pasan años estudiando (invirtiendo dinero, tiempo con familia y amigos, etc), desarrollan una tarea de responsabilidad y su trabajo no es reconocido. Es más que lógico que los buenos profesionales que quieran irse, se vayan a un lugar a donde los profesionales sean respetados, su trabajo sea respetado y tengan verdaderas posibilidades de desarrolarse profesional y económicamente.
La utopía gremial uruguaya es que todos ganen lo mismo, desde la mas simple de las tareas hasta el más responsable y sacrificado de los profesionales. Al parecer nunca entenderán que tiene que haber grandes brechas salariales entre quienes tienen formación y responsabilidad y quienes no, siempre que los salarios bajas sean dignos y suficientes (cosa que no tiene nada que ver con la diferencia que haya con los salarios altos)
La marea siempre va a bajar. Uruguay es y será un país de ciclos muy marcados. Hoy hay una bonanza muy grande, que va a durar lo que dura el ciclo (en mi opinión, no mas de cuatro años). Esto es debido a varios factores macroeconómicos muy difíciles de vencer, por lo menos para Uruguay como sociedad, y no espero cambios en este aspecto. La realidad de ahora es diferente a la del 2002 y será diferente a la del 2012. Hoy por hoy, es buena. Esto no quiere decir que sea buena para todos, sino que es la realidad buena esperable para Uruguay, según como están las cosas.
Y no tiene que ver nada con el gobierno, sino por una situación coyuntural.