En matemáticas se usa mucho el método del absurdo para demostrar teoremas. Asumis que el postulado es falso, y llegas a una situación absurda.
Venezuela está empecinada en demostrar la economía de mercado por el mismo medio. Después de nacionalizar la mitad de la banca, las telecomunicaciones, algunos hoteles 5 estrellas, las fábricas de cemento, los proveedores de insumos para la industria petrolera y ya no me acuerdo qué más, se quedaron sin divisas. La semana pasada se vieron forzados a devaluar la moneda, que se mantenía artificialmente a 2.15 bolívares fuertes por dólar. En el mercado paralelo, el dólar estaba a 5.5. Devaluar el cambio oficial era muy natural, ya que ni siquiera los enormes ingresos del petróleo alcanzaban para venderlos al precio de ganga de 2.15.
Pero en Venezuela, las líneas rectas no existen. En vez de devaluar y abrir el mercado de cambio, optaron por un sistema triple de cambio. El cambio oficial para los productos esenciales y para el sector público pasa a ser de 2.60. El cambio oficial para todo lo demás va a ser 4.30. Ya ahí se pone divertido. Quien decide qué es esencial, y qué no? Esto le da una ventaja al sector público, pero genera oportunidades de arbitraje.
Además de todo, el cambio paralelo va a seguir existiendo, porque el cambio va a seguir controlado. El gobierno culpa al paralelo del 25% de inflación, así que lo quiere controlar, pero las medidas de las que hablan son contradictorias. Por ahora lo que hicieron fue subastar 50 millones de dólares en bonos a 4.30. Las ofertas fueron de 500 millones, lo cual es un indicio de que, para mover el paralelo, van a necesitar mucho dinero.
Mientras tanto, el mejor negocio en Venezuela es especular. El que logró comprar dólares en la subasta a 4.30, lo va a vender después en el paralelo a 5.50, haciendose un 30% de ganancia.
Me parece que estas medidas están inspiradas en una telenovela venezolana.


